Contingencias comunes:
Son aquellas enfermedades o accidentes que pueden ocurrirle a cualquier persona, independientemente de su profesión.
Por ejemplo, un español que trabaje en cualquier sector y cotice en la Seguridad Social tendrá derecho a percibir un subsidio por enfermedad común o maternidad, por ejemplo.
Profesionales:
Son aquellas enfermedades o accidentes que están relacionados directamente con la actividad profesional del trabajador.
Por ejemplo, un enfermero que contraiga una enfermedad relacionada con su trabajo (como la hepatitis C) tendrá derecho a un subsidio por enfermedad profesional.
Cotizaciones:
Las cotizaciones son los aportes que hace el trabajador y su empresa a la Seguridad Social.
En España, las cotizaciones se dividen en tres tipos:
– Cotizaciones por contingencias comunes: estas cotizaciones se destinan a cubrir los subsidios por enfermedad, maternidad, paternidad, invalidez, jubilación, etc.
– Cotizaciones por contingencias profesionales: estas cotizaciones se destinan a cubrir los subsidios por enfermedad profesional, accidente de trabajo, etc.
– Cotizaciones a la Seguridad Social: estas cotizaciones se destinan a cubrir los gastos de la Seguridad Social (como el subsidio por desempleo).
Para llevar a cabo las cotizaciones, el trabajador y su empresa deben registrarse en la Seguridad Social.
Una vez registrados, el trabajador deberá cotizar por cada contingencia a la que tenga derecho.
Por ejemplo, si el trabajador está registrado en la Seguridad Social como autónomo, deberá cotizar por enfermedad común, enfermedad profesional, jubilación, etc.
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