Si tienes o estás pensando en crear una empresa en España, es fundamental que conozcas los impuestos a los que tendrás que hacer frente. El sistema tributario español es amplio y, aunque muchos impuestos son comunes en todo el país, algunos pueden variar dependiendo de la comunidad autónoma o del municipio en el que se ubique la empresa. Conocer las obligaciones fiscales te permitirá evitar sanciones, optimizar tus recursos y gestionar de manera eficiente el crecimiento de tu negocio.
El sistema tributario español clasifica los impuestos en dos grandes categorías: impuestos directos e impuestos indirectos. Además, los impuestos pueden ser de ámbito estatal, autonómico o local. A continuación, se describen los principales impuestos que las empresas deben pagar:
Impuestos estatales
Impuestos directos estatales
Los impuestos directos son aquellos que se aplican sobre los ingresos o beneficios generados por la empresa. Estos son algunos de los más relevantes:
Impuesto sobre Sociedades (IS)
Es el impuesto que grava los beneficios de las sociedades, ya sean limitadas, anónimas, cooperativas u otras entidades jurídicas con sede en España. El tipo general es del 25%, pero existen tipos reducidos, como el 15% para las nuevas empresas o el 20% para cooperativas fiscalmente protegidas. Se declara anualmente, aunque el pago se realiza fraccionado en tres plazos a lo largo del ejercicio. El Modelo 200 es el utilizado para la declaración de este impuesto, y el Modelo 202 para realizar los pagos fraccionados.
El tipo impositivo puede variar dependiendo de ciertos factores, como el tamaño de la empresa:
- Tipo General: El tipo impositivo general es del 25% para todas las empresas, independientemente de su tamaño.
- Empresas de Nueva Creación: Las empresas de nueva creación (durante los primeros dos años de actividad) pueden beneficiarse de un tipo impositivo reducido del 15%. Este tipo es aplicable tanto a pequeñas como a medianas empresas durante su fase inicial.
- Empresas de Economía Social: Las cooperativas y entidades de economía social pueden beneficiarse de un tipo reducido del 20%.
Para grandes empresas, el tipo es el estándar del 25%, aunque si tienen un volumen de negocio superior a 10 millones de euros, pueden estar sujetas a un régimen de control más estricto por parte de la Agencia Tributaria.
Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF)
Aunque este impuesto es principalmente para individuos, las empresas deben realizar retenciones de IRPF a los trabajadores o profesionales autónomos con los que interactúan. El tipo general de retención es del 15%, aunque se reduce a 7% en los dos primeros años de actividad para nuevos autónomos. Los modelos que se utilizan para declarar estas retenciones son el Modelo 111 (para retenciones en nóminas o en facturas) y el Modelo 115 (para retenciones de alquileres).
Otros modelos
Declaración trimestral para autónomos en estimación directa, destinada a pagar impuestos a cuenta sobre los beneficios obtenidos en el negocio. Implica declarar ingresos, gastos y el pago fraccionado del IRPF.
Similar al modelo 130, pero específico para autónomos en estimación objetiva (módulos). Aquí se paga una cantidad fija según parámetros predefinidos (como el número de empleados o el tamaño del local).
Declaración resumen anual de las retenciones e ingresos a cuenta del IRPF, comúnmente utilizada para informar de las nóminas y pagos a trabajadores.
Declaración anual informativa de operaciones con terceros que superen los 3.005,06 € en total durante el año.
Declaración informativa para operaciones intracomunitarias, aplicable a transacciones de bienes y servicios en la UE.
Declaración para el alta, modificación o baja en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE).
Impuestos indirectos estatales
Los impuestos indirectos gravan el consumo y no los ingresos de las empresas. El más común es el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA)
Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA)
Este impuesto grava el consumo de bienes y servicios. Se aplica a nivel nacional, aunque en Canarias se aplica el Impuesto General Indirecto Canario (IGIC). El tipo general de IVA es del 21%, pero existen tipos reducidos como el 10% (para alimentos, transporte, etc.) y el 4% (para productos de primera necesidad, como medicamentos o libros). Las empresas deben declarar el IVA que han cobrado a sus clientes (IVA repercutido) y el IVA que han pagado a sus proveedores (IVA soportado) a través del Modelo 303 (autoliquidación trimestral) y Modelo 390 (resumen anual).
Impuestos autonómicos y municipales
Los impuestos autonómicos y locales son aquellos que varían según la comunidad autónoma o el municipio donde se encuentre la empresa.
Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE)
Este impuesto grava la actividad económica de las empresas y autónomos. Si el volumen de negocios anual es inferior a un millón de euros, la empresa estará exenta de pagar este impuesto, aunque deberá darse de alta en el IAE utilizando los Modelos 036 o 037. El IAE se paga anualmente y depende del tipo de actividad de la empresa.
Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI)
Las empresas que poseen propiedades en España deben pagar este impuesto, que varía en función de la ubicación y el valor catastral del inmueble. Se gestiona a nivel local, y el pago debe realizarse anualmente.
Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM)
Este impuesto se aplica a las empresas que poseen vehículos, ya sean de uso comercial o de otra índole. La tarifa varía según el tipo de vehículo y el municipio donde esté matriculado.
Tasas y Contribuciones Municipales
Dependiendo de la actividad de la empresa, también se pueden tener que abonar diversas tasas municipales, como las licencias de apertura, tasas por el uso de agua, electricidad, residuos urbanos, etc.
Impuestos Especiales y Medioambientales
Existen impuestos especiales que se aplican a ciertos productos y actividades, como:
- Impuestos sobre Hidrocarburos: Este tipo de impuestos gravan la producción, importación y distribución de productos petrolíferos y derivados.
- Impuesto sobre el Alcohol y Bebidas Alcohólicas: Grava la producción e importación de bebidas alcohólicas, y varía según el tipo de alcohol.
- Impuestos Medioambientales: Estos incluyen el Impuesto sobre los Gases Flúorados de efecto invernadero, el Impuesto sobre la Producción de Energía Eléctrica y otros impuestos relacionados con la protección del medio ambiente.
Cotizaciones a la Seguridad Social
Las empresas en España deben realizar aportaciones a la Seguridad Social en nombre de sus empleados. Esta cotización incluye las contribuciones al régimen general y las aportaciones por contingencias comunes, desempleo y pensiones. El coste de contratar a un trabajador puede ser considerablemente más alto que el salario bruto, ya que también se incluyen las cotizaciones empresariales, que representan una carga significativa sobre los ingresos de la empresa.
Tabla resumen de los principales modelos tributarios
| Impuesto | Modelo | Descripción |
|---|---|---|
| Pagos fraccionados IRPF | 130 | Declaración trimestral para autónomos en estimación directa. |
| Pagos fraccionados en módulos | 131 | Declaración trimestral para autónomos en estimación objetiva. |
| Retenciones de nóminas | 190 | Resumen anual de retenciones de nóminas y pagos a trabajadores. |
| Operaciones con terceros | 347 | Declaración de operaciones superiores a 3.005,06 €. |
| Operaciones intracomunitarias | 349 | Declaración de operaciones de bienes y servicios en la UE. |
| Impuesto de Actividades Económicas | 840 | Declaración de alta, modificación o baja en el IAE. |
| Impuesto sobre Sociedades | 200 | Declaración anual del Impuesto sobre Sociedades. |
| Impuesto sobre Sociedades | 202 | Pago fraccionado del Impuesto sobre Sociedades. |
| Impuesto sobre el Valor Añadido | 303 | Autoliquidación trimestral del IVA (ventas e importaciones). |
| Impuesto sobre el Valor Añadido | 390 | Resumen anual del IVA. |
| Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE) | 036/037 | Alta en el IAE (obligatorio para todas las empresas). |
| Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) | 111 | Declaración de retenciones a empleados y profesionales autónomos. |
| Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) | 115 | Retenciones sobre alquileres de inmuebles. |
| Impuesto sobre Bienes Inmuebles | – | Pago anual del IBI para las empresas propietarias de inmuebles. |
| Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica | – | Pago del IVTM para empresas con vehículos. |
| Tasas Municipales | – | Licencias, residuos, agua, luz, etc. |
Conclusión
En resumen, las empresas en España tienen que cumplir con una variedad de obligaciones fiscales y tributarias que incluyen impuestos directos, indirectos, autonómicos y locales. Conocer y gestionar adecuadamente estos impuestos no solo es esencial para evitar problemas con la Agencia Tributaria, sino también para optimizar los recursos y asegurar la sostenibilidad del negocio. Para garantizar que todas estas obligaciones se cumplen correctamente, muchas empresas optan por contar con asesores fiscales que les ayuden a gestionar su fiscalidad y maximizar sus ventajas.
